"Es indudable que con un cómico podremos reírnos a carcajadas, y hasta es necesario que así sea; pero también lo es que con un humorista quedamos satisfechos de un modo diferente... J. J. Rovella sabe que no alcanza con que el otro se ría; es necesario que también conozcan su modo de pensar, que se cree un código, que exista ese diálogo indispensable que completa la obra." - Sendra
Edición año 2007